Por un lapso de casi dos meses que comprende desde el primer día de septiembre hasta el 25 de octubre, el gas envasado había mantenido “congelado” su precio. Sin embargo, como si de levantar la tapa de una olla a presión se tratase, en once días se produjeron dos nuevas subas. Por esto último, desde mañana en los distintos expendios habilitados para la venta de este producto rigen nuevos valores autorizados por la Secretaría de Energía.
De la redacción de EL NORTE
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No es novedad que los aumentos están a la orden del día en cada rincón de la economía nacional. La remarcación ya es una práctica casi rutinaria en los distintos comercios, al punto que la sorpresa aparece cuando un producto mantiene su precio a pesar del paso del tiempo. Esta situación se vivió en los depósitos dedicados a la venta de garrafas en el mes de octubre.
Sucede que, durante casi dos meses los expendios que comercializan gas envasado habían visto sus carteleras idénticas. Como se trata de un rubro en el que las modificaciones deben ser autorizadas por la Secretaría de Energía -dependiente del Ministerio de Economía-, no podían variar la cotización de sus productos. Para ejemplificar, el último aumento previo a las elecciones generales se efectuó el 1 de septiembre, de ahí en adelante debieron esperar hasta el 25 de octubre para recibir las nuevas listas.
Sin embargo, el escenario se tornó más sorpresivo para los comerciantes de un sector que venía completamente “planchado”, dado que desde hoy -lunes seis de noviembre-, 12 días después, amanecieron con una actualización.
En números, el aumento de garrafas en octubre
Al momento de referirse a este bien cabe destacar que existen dos tipos de garrafas de mayor circulación y que suelen ser el termómetro: las de 10 y 15 kilógramos. También es necesario aclarar que la regulación de los precios recae solamente en los servicios “en puerta”, cuando el usuario retira directamente su envase en los expendios habilitados.
En cuanto al artículo de menor tamaño, hasta ayer cotizaba en los depósitos $3.030 -luego de la suba del 10 % a fines de octubre-. No obstante, desde las primeras horas de la jornada los carteles denotan un nuevo valor de $3.390. Por lo que respecta al envase de 15 kilos, actualmente se comercializa $5.080, mientras que dos días atrás su precio era de $4.540.
Fuera de estos locales, las tarifas en los servicios de entrega a domicilio o para comerciantes dedicados a la reventa son establecidas de manera libre por cada empresa del sector. En este apartado las firmas no afrontan ningún tope establecido por el ente gubernamental, por ende, los precios de las garrafas irán variando en cada una de octubre a noviembre. De manera estimativa, hasta el pasado fin de semana una garrafa de 10 kilos representaba un gasto de $3.650 para aquellos clientes que esperaban recibirla en sus casas. A partir de hoy, se espera que ronde los $4.100. Idéntica situación se advierte en los otros tubos, los cuales se comercializaban en las calles a $5.575 y que tras el aumento de mañana pasan a valer $6250.
En primera persona
Puertas adentro la situación de los comerciantes es de total incertidumbre. “Al no manejar vos mismo el precio del producto que vendes, muchas situaciones se complican”, aseguran mercaderes nicoleños consultados por este medio. Asimismo, la tensión social que genera la inflación se ve en el día a día de los negocios y este sector no se abstrae: “Aunque no son todos, varios clientes se quejan cuando sube pero nosotros no podemos hacer nada. Es cansador tener que explicarles que no podemos decidir en el precio, nos pasan un valor y tenemos que ponerlo”. Por otro lado, los vendedores notan un cambio en las prácticas de sus compradores, atados a la evolución inflacionaria y la pérdida de poder adquisitivo. “Se mueve mucho más en las semanas del mes que uno cobra. Hay gente que estira el uso lo más que puede o pasa días sin reponer su garrafa porque todavía no cobró, antes no pasaba tan seguido”, analizan.
“Ahora veremos cuánto tiempo se mantienen estos precios, las elecciones pueden cambiar todo. De cara al verano quizás vuelva a subir”, sentenciaron a la espera de la temporada baja.