Este miércoles se procederá a desalojar a las familias que hace trece días tomaran las casas deshabitadas en el desarrollo habitacional emplazado en zona oeste. Las fuerzas policiales intentarán disuadir a los ocupantes, que ya avisaron que defenderán el lugar que tomaron ilegalmente. Ayer los usurpadores cortaron calle Alberdi y quemaron cubiertas. Clima de tensión.
De la Redacción de EL NORTE
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El conflicto que comenzara el jueves 15 de este mes cuando 18 familias tomaron viviendas deshabitadas en barrio San Francisco tendría hoy desenlace, cuando las fuerzas policiales procedan con el operativo de desalojo solicitado por el fiscal Jorge Leveratto y ordenado por la jueza María Eugenia Maiztegui.
Las familias usurpadores advirtieron que resistirán el desalojo, y que solo se retirarían del lugar si las autoridades de Gobierno les entregan un terreno y materiales de construcción. Esto no ocurrirá puesto que sienta un precedente para que otras familias utilicen el mismo modus operandi y, a partir de un hecho ilícito, consigan sus objetivos.
Lo cierto es que en estos trece días la tensión ha ido escalando. Las familias usurpadoras se manifestaron ayer con una quema de cubiertas y corte de tránsito en calle Alberdi pidiendo un techo o un terreno donde poder edificar.
Las familias que se encuentran realizando esta toma ilegal de tierras y viviendas provienen de casas muy precarias en barrios aledaños, adonde regresan para utilizar sus baños. También, aprovechan la oportunidad para cambiarse de ropa o dormir algunas horas en un colchón.
Las casas usurpadas están a medio construir y no cuentan con los servicios básicos completos, se encuentran bandalizadas y sin baños o cocinas funcionales. “Nosotros no dejamos mucho la casa porque nos pasó que otras familias quisieron usurparlas. Estamos luchando por tener un techo y por que no nos saquen ni la policía ni otras personas”, confesó a este medio Ramona.
Otra de las cuestiones que marcaron las familias en cuestión es que “ya están llegando los primeros fríos y no tenemos nada para tapar las puertas y ventanas. No nos permiten ingresar colchones, muebles o chapas para poder hacer algo más cerrado y que nuestro chicos no pasen frío”, tiró Juan.
Actualmente, las casas tienen tapada con lonas las ventanas para que a la noche no pase tanto el frío. Sin embargo, no es suficiente, según cuentan las familias, para que sus hijos no sufran las bajas temperaturas que se vienen suscitando en esta época del año.
Hay usurpadores que no pudieron tomar una casa y decidieron plantar palos en terrenos vacíos que aún no están edificados. “Yo agarré este terreno porque las casas preferimos que las usen las familias que tienen chicos. Yo dejé a mi familia en mi casa, que está acá en barrio San Francisco, porque no puedo traer a mis nenes. Hay muchos mosquitos, ni siquiera me dejan pasar un colchón o cortar el pasto. Solamente queremos un lugar donde vivir dignamente”, cuenta un hombre que tiene unas lonas con las que construyó una especia de carpa para dormir.