Tres semanas atrás, la automotriz había paralizado temporalmente las actividades por la falta de piezas importadas, debido a la imposibilidad de concretar pago a proveedores por falta de dólares. Con un frente más despejado, este lunes volvió a producir. Aunque el problema no está resuelto completamente, desde General Motors lograron obtener parte de las divisas para realizar pagos a proveedores.
De la redacción de EL NORTE
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La automotriz General Motors (GM) anunció que retomó la producción industrial en su planta de Alvear a partir de este lunes, luego de haber logrado “avances parciales” en el pago a sus proveedores del exterior.
En un comunicado, la compañía radicada en el Gran Rosario informó que “ha logrado avances parciales con sus proveedores cuyos pagos al exterior siguen demorados”. Aunque también indicó que “no obstante, la compañía está en condiciones de retomar la producción industrial en su planta de Alvear, provincia de Santa Fe, a partir del 30 de octubre”.
Por otra parte, GM reiteró su “compromiso con el crecimiento económico e industrial con valor agregado para el país”, detalla en el comunicado oficial.
La automotriz, que fabrica en el país los modelos Chevrolet Tracker y Chevrolet Cruze, había paralizado temporalmente la producción hace tres semanas por un problema en la cadena de suministro. En ese momento, explicaron que tenían inconvenientes para realizar los pagos a varios proveedores del exterior en función de la fuerte restricción externa que vive la Argentina y producto de eso, la planta registraba un faltante de piezas importadas que hacía imposible continuar con el funcionamiento.
Ante esta situación desde GM definieron interrumpir temporalmente la actividad. “La producción será reanudada tan pronto se reciban las piezas de los proveedores afectados”, explicaban en ese momento desde la automotriz en un comunicado. Los componentes faltantes provienen de distintos mercados, incluso de países asiáticos.
El cambio
De todos modos, la semana pasada el Gobierno nacional anunció la ampliación del uso del swap de divisas con China hasta 47.000 millones de yuanes, equivalentes a U$S 6500 millones. Con ese alivio cambiario, el ministro de Economía, Sergio Massa, señaló que comenzaría un “trabajo de Aduana, Secretaría de Comercio y Banco Central para acelerar las importaciones”, lo que permitirá facilitar los procesos productivos.
“En un momento en el que la economía argentina cruzó el año de la peor sequía de su historia, el swap nos da la tranquilidad de sumar una garantía para que no tengamos presión sobre los dólares financieros, para que adquiramos tranquilidad en reservas y para que aquellos que tienen actividad económica cruzada por importaciones tengan la posibilidad de acelerar esos pagos de importaciones”, aseveró el ministro la semana pasada.
En ese contexto, aunque el problema no está resuelto completamente, desde GM lograron obtener parte de las divisas para realizar pagos a proveedores y, en ese marco, anunciaron la reanudación de la producción.