Nicolás Barrios circula libremente a pesar de que debe cumplir con arresto domiciliario. Fue condenado a 14 años y seis meses de prisión por tentativa de homicidio. También deberá responder en próximo juicio por la muerte del policía Mauro Maldonado ocurrida en el mismo enfrentamiento. Inexplicablemente, el juez de Garantías Ricardo Prati, la jueza Belén Ocariz y los integrantes de la Cámara de Apelaciones, Guillermo Martínez, Eduardo Alomar y Reinis Renholds, se negaron a revocar la morigeración y a poner tras las rejas a los acusados.
De la redacción de EL NORTE
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La familia del oficial inspector Mauro Ezequiel Maldonado inició un largo peregrinar ante la Justicia luego de que el policía fuera ultimado durante el cumplimiento de su deber. Debió esperar cinco largos años para que se realizara el juicio, pero los tiempos para los principales imputados fueron más cortos ya que apenas unos meses después del hecho, durante el proceso, pudieron acceder al beneficio del arresto domiciliario a pesar de los múltiples reclamos de la familia. El juez de Garantías Ricardo Prati, la jueza del debate Belén Ocariz y los integrantes de la Cámara de Apelaciones, Guillermo Martínez, Eduardo Alomar y Reinis Renholds, se negaron a revocar la morigeración y a poner tras las rejas a los acusados. Entre ellos se encuentra Nicolás Barrios, a quien a pesar de las restricciones impuestas se lo puede ver en las imágenes aportadas por la familia haciendo “wheelie” en la costanera o frecuentando boliches bailables de la zona.
El policía, por cuya muerte están imputados, custodiaba una casa junto a otros compañeros en barrio Las Mellizas para evitar que un grupo de vecinos enardecidos la incendiaran cuando recibió un disparo mortal. Por el hecho siete hombres fueron detenidos acusados de herir durante la reyerta a varios agentes de seguridad y de ocasionar la muerte de Maldonado. Durante el juicio realizado en el mes de marzo, cuatro de ellos fueron condenados a 14 años y seis meses de prisión por intento de homicidio respecto de los restantes policías. En tanto, por la muerte de Maldonado se anuló el debate que deberá volver a efectuarse en fecha próxima.
A pocos meses del hecho, en marzo de 2019, Gabriel Ganón, abogado defensor de los imputados Nicolás Barrios y Mauricio Giménez, pidió que fueran excarcelados. El fiscal Darío Giagnorio se opuso considerando que los detenidos se encontraban imputados en delitos muy graves, tanto penal como institucionalmente, para los que se prevé pena en expectativa muy alta y se presume la posibilidad de fuga o entorpecimiento. No entendió lo mismo el juez de Garantías Ricardo Prati, quien concedió el arresto domiciliario basado en informes socioambientales, en el hecho de que tenían familia, por la corta edad que tenían en ese momento los imputados –21 años de edad en el caso de Barrios y 22 en el caso de Giménez– y la falta de antecedentes. Les impuso la obligación de cumplir reglas, someterse al cuidado del Patronato de liberados bajo el monitoreo de una pulsera electrónica advirtiendo que el incumplimiento injustificado implicará la revocación del beneficio. Poco después solicitaron salidas laborales, a lo que el fiscal también se opuso por las mismas razones, pero nuevamente el juez de Garantías resolvió en favor de los acusados.
Nuevos pedidos
Luego de que fueran juzgados en marzo de 2023, tanto el fiscal Darío Giagnorio como el abogado Julián Cruz Domínguez, asesor letrado de la policía, reiteraron sendos pedidos de revocación del arresto domiciliario al haber cambiado las circunstancias, ya que en ese juicio fueron condenados por tentativa de homicidio a 14 años y medio de prisión y porque además volverían a ser juzgados por el homicidio de Maldonado. Pero aquí tampoco la Justicia escuchó porque la magistrada de juicio María Belén Ocariz ratificó la prisión domiciliaria. Nuevamente la familia apeló, esta vez ante la Cámara de Apelaciones integrada por los jueces Eduardo Alomar, Guillermo Martínez y Renholds Reinis, pero tampoco aquí la familia del policía Mauro Ezequiel Maldonado fue escuchada.
Unos pocos informes positivos, sin mayores datos, emitidos desde el Patronato de liberados, fueron suficientes para rechazar los planteos de la parte acusadora.
En este último y desesperado pedido de justicia presentaron fotos y videos que muestran los incumplimientos de Barrios. Se espera que ahora caiga la venda que tapa los ojos de la Justicia en San Nicolás.
Las causas
En el mes de marzo de este año, Nicolás Barrios junto a seis personas más fueron juzgados por un jurado popular por el homicidio consumado de Mauro Maldonado, por tentativa de homicidio respecto de varios agentes policiales y daños. El jurado popular resolvió declarar no culpable a Enzo Banegas, otro de los acusados, y establecer responsabilidad por “daños” respecto de Juan Arroyo e Iván Cabrera. En cuanto a Máximo Arroyo, Axel González, Nicolás Barrios y Mauricio Giménez, fueron condenados por el delito de tentativa de homicidio a una pena de 16 años y seis meses. Pero además determinó, en un fallo sin precedentes, que Giménez y Barrios sean juzgados nuevamente con la integración de un nuevo jurado por el homicidio del policía Mauro Maldonado debido a que, aunque hubo mayoría por la culpabilidad, no se logró la unanimidad requerida para la condena. Se trató de un juicio complejo por la naturaleza del hecho, la pluralidad de testigos, la cantidad de víctimas, de acusados y de defensores que participaron.
El crimen
Mauro Ezequiel Maldonado, de 33 años, fue asesinado de un disparo en la cabeza cuando, junto a otros policías, custodiaba una vivienda en barrio Las Mellizas. Desde hacía varias horas, aquel 1º de mayo de 2018 el clima estaba enrarecido por la disputa entre dos grupos y fue subiendo en grados de violencia hasta que el homicidio de un joven de 27 años, residente en el lugar, desencadenó el caos. Una horda de vecinos enfurecidos que exigían que fuera desalojada de la franja barrial una familia a la que consideraban conflictiva desató una lluvia de piedras y botellazos contra los efectivos que buscaban calmar a los agresores. Pronto comenzaron los disparos de balas de goma por parte de la policía y los tiros con armas de fuego de los agresores. Hasta que uno de esos disparos impactó en la cabeza del oficial Maldonado que cayó mortalmente herido. Más de 30 personas resultaron afectadas por el ataque, en su mayoría efectivos policiales.