Leo arrancó el partido sentado en el banco de suplentes, pero ingresó en el segundo tiempo y comenzó a desplegar su magia en la Scaloneta.
La Selección Argentina fue una verdadera orquesta de buen fútbol en el primer tiempo ante Paraguay. Al ritmo de Rodrigo De Paul, Alexis Mac Allister y Julián Álvarez, dominó de principio a fin, marcó rápidamente la diferencia gracias a Nicolás Otamendi y hasta hizo temblar los postes del arco de Carlos Coronel. Pero lo hizo sin su director, Lionel Messi, quien no tardó en sacarse la pechera en el complemento y saltar al césped del Monumental.
Apenas inició la segunda mitad, con el marcador 1-0 en favor de la Scaloneta, Lionel Scaloni le susurró unas palabras al oído al N°10 y lo mandó a calentar a un costado del campo de juego. De inmediato, las tribunas explotaron y bajó la ovación”Messi, Messi…”.
En la antesala del choque con la Albirroja de Daniel Garnero se barajaba la posibilidad de que Messi sumara alrededor de 40 minutos en cancha. Y así fue: ingresó a los 7 del segundo tiempo por Álvarez, se llevó todas los los aplausos y hasta le negó la cinta de capitán a Otamendi, quien se la terminó ajustándo al brazo izquierdo entre risas.