En el marco de una de las causas que devino en múltiples allanamientos contra la Policía Bonaerense, los investigadores tendrían confirmado que Lucas Artioli -oficial de la fuerza provincial- es quien comandaba la asociación ilícita que perpetró distintos delitos.
Desde anoche múltiples allanamientos se realizaron por toda la ciudad, involucrando dos causas envueltas en una investigación conjunta con un foco similar, la Bonaerense. A cargo de ambos procedimientos se encuentran los fiscales Marcantonio y Mugica Díaz. Este último lleva adelante los trabajos pertinentes para intentar dilucidar todos los involucrados en una asociación ilícita creada entre policías de la Bonaerense y civiles.
La investigación apunta a Lucas Artioli, oficial de la fuerza provincial, como cabecilla de la banda. El mencionado imputado afrontaría varios cargos, por su rol dentro de la banda y por los distintos ilícitos que lo involucran.
Según destacó el fiscal Mugica Díaz en diálogo con Vamos Viendo (Radio U), el proceso de investigación comenzó el año pasado a partir de un robo. En ese entonces, luego del secuestro de un teléfono celular dieron cuenta de esta estructura delictiva que vinculaba a distintos miembros de la Bonaerense.
“Por la causa de Fiscalía 14 hay detenidos cinco efectivos policiales y tres civiles. Hasta el momento son 18 personas implicadas en la causa”, aclaró Mugica Díaz sobre el caso de su competencia. A continuación, agregó: “Acá no está en juego ninguna comisaría, se trata de efectivos y civiles que por su cuenta armaron esta sociedad ilícita”.
Estas organizaciones delictivas comandadas por funcionarios policiales de la Bonaerense, se dedicaban a cometer delitos contra la propiedad (hurto, robo agravado en poblado y en banda, mediante el uso de armas). También delitos contra la libertad (privación ilegal de la libertad), conjuntamente con civiles.
Los fiscales también lograron determinar que se efectuaban custodias sin la debida registración y sin dar aviso a las superiores y manejo discrecional de las horas adicionales (Core) trabajadas, beneficiando así al personal policial elegido, del cual a su vez, se recibían retoños de dinero, lo cual configura un delito de fraude a la administración pública.
