Carlitos arregló su llegada al Rojo para reemplazar al Ruso Zielinski
Carlos Tevez se pondrá el traje de bombero para intentar apagar el incendio que consume a Independiente. Se hará cargo de tratar de controlar las llamas en un Infierno: con el triunfo de Huracán ante Banfield por 2-0, el Rojo quedó en zona de descenso y, si la Copa de la Liga finalizara hoy, debería jugar un triangular con el Globo y Colón para definir cuál de los tres pierde la categoría.
El Apache le ganó la pulseada a Walter Erviti, otro de los candidatos. Y no dudó ni un segundo en hacerse cargo de una situación de alta complejidad.
Los principales puntos que marcó Tevez en la charla con la Comisión Directiva fueron los refuerzos y el sistema táctico. El Apache pidió un central, un volante ofensivo y un delantero que pueda cumplir con la función de extremo y segunda punta. Además, comentó que podría formar con 5-3-2 o 4-4-2.
El lunes a las 17 se juntó con el presidente del club, Néstor Grindetti, y con otros dos integrantes de la secretaría técnica: Jorge Damiani y Carlos Montaña. La reunión fue en el hotel Madero. En ese cónclave contó su proyecto, mostró mucho entusiasmo y se explayó durante más de una hora.
También comentó que está dispuesto a cobrar un salario muy bajo hasta diciembre y que recién en ese momento, dependiendo de su desempeño, se sentaría a hablar por las cifras de su vínculo. Su prioridad, está claro, no es el dinero.
El Apache solo tuvo una experiencia como director técnico en Rosario Central: sacó el 40% de los puntos posibles, con 6 triunfos, 11 empates y 7 derrotas en 24 partidos.