Una contadora que trabajaba en el Ministerio de Trabajo de la Nación fue asesinada en su casa del barrio porteño de Constitución, y por el femicidio detuvieron a su novio, también empleado de la misma cartera, que estuvo prófugo durante tres días.
El cuerpo de Marina Inés Trípodi, de 38 años, fue encontrado maniatado, con golpes y signos de asfixia el pasado 25 de febrero en un domicilio en la calle Pedro Echagüe al 1.100.
Desde entonces, no se supo nada de su pareja, Jonatan Emmanuel Bin, de 37 años, pero finalmente tras tres días de búsqueda, quedó detenido y fue puesto a disposición de la Justicia.
A través de un llamado a la línea 911 se denunció que una mujer estaba desvanecida dentro de su casa.
Efectivos de la Comisaría Vecinal 1 C de la Policía de la Ciudad dialogaron con la cuñada de la víctima, quien relató que en la vivienda estaban la pareja y sus dos hijas.
Contó que ese día se marchó con las dos menores y, al regresar, vio a Marina sin signos vitales, y fue así que inició el operativo para encontrar a Bin.
La autopsia realizada arrojó que la mujer falleció por varios politraumatismos y presentaba signos de asfixia mecánica, que serían producto de las ataduras.
Bin fue identificado por detectives de la División Homicidios en el partido bonaerense de Hurlingham, y lo encontraron saliendo de un domicilio para ir a comprar a un kiosco.
El sospechoso se negó a declarar y quedó imputado por delito de femicidio y abuso sexual, ya que no se descarta que el hecho haya ocurrido tras un ataque sexual.
El caso está a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°26 y fue caratulado “homicidio agravado por haber sido cometido con violencia de género” (femicidio) y “abuso sexual”, delito que prevé una pena de prisión perpetua.