En la sesión ordinaria celebrada el jueves 8 de abril, se aprobó por mayoría el Código de Convivencia y Faltas para el Partido de San Nicolás. Se trata de una ordenanza propuesta por el Ejecutivo, a fin de obtener un mejor comportamiento por parte de los vecinos, tener un buen trato entre los mismo y cuidar la ciudad. El responsable del Juzgado Municipal de Convivencia, Defensa al Consumidor y Faltas de San Nicolás, Dr. Matías Grams, será en quien recaigan las causas de aquellos que rompan las normas establecidas en el nuevo código. Comenzará a regir a partir el 14 de mayo.
De la Redacción de EL NORTE
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Con la idea de mejorar la convivencia entre vecinos de San Nicolás, el Ejecutivo presentó un proyecto en el Honorable Concejo Deliberante, el cual esgrime la necesidad de establecer un código de convivencia y faltas para todo el partido. Es un manuscrito de 372 artículos, el cual puede buscarse por cualquier nicoleño en la página web del Concejo Deliberante de nuestra ciudad, así podrán estar al tanto de todos los puntos.
“Se trata de un proyecto que plantea, no solamente cuestiones que ya estaban planteadas en otras ordenanzas y que ahora se pondrán en una sola, sino que además le da una vuelta de tuerca a todo lo que tiene que ver con la convivencia entre los vecinos de San Nicolás”, manifestó el Ing. Sergio Ponce, Presidente del Honorable Concejo Deliberante.
También, contó que el código tiene penalidades por los malos comportamientos, “como por ejemplo tirar basura en espacios públicos, realizar una ofensa hacia algún docente, con el comportamiento en general entre vecinos”, afirmó Ponce. La idea es que pueda intervenir el Juzgado de Faltas y no solamente el Poder Judicial.
“Este código tiene un tinte netamente educativo, preventivo y protector. Cuando hablo de la esencia protectora, hago referencia a que esta ordenanza protege el medio ambiente, los espacios públicos, a los docentes y auxiliares de la educación, a los médico y auxiliares de los centros de salud, sanciona a quien maltrate animales. Todo esto no se encontraba en la anterior legislación que teníamos”, expresó el Juez de faltas, Dr. Matías Grams.
Control y penas
Uno de los desafíos que tendrá el Ejecutivo con respecto a este código, va a ser su correcto control, teniendo en cuenta que no es una tarea fácil pero necesaria para poder hacer aplicar la nueva ordenanza que entra en vigencia a partir del 14 mayo.
“Esto va a requerir una coordinación con todas las áreas inspectoras del Municipio y con la policía local. De hecho hemos estado brindando capacitaciones a todo el personal municipal y a la propia policía, ya que van a ser los encargados de controlar todas estas situaciones. Van a poder actuar de oficio si la advierten o en base a lo requerido por algún ciudadano que detecte esa situación”, tiró Grams.
En cuanto a las penas, el código establece varias que devienen de tres aristas globales: Pena natural, pena accesoria y pena económica. “La pena natural hace referencia a que cuando la conducta contravencional generada por la persona produce un daño de tal magnitud que la pena del juzgado queda insignificante y no es necesario sancionarlo”, explica Matías Grams.
“Las penas accesorias hacen referencia a lo que contaba anteriormente, por ejemplo trabajo comunitario, la reparación del daño causado, las obligaciones de conductas, que son sin dudas penas muy superadoras respecto de lo que teníamos”, manifestó el Juez de faltas.
Desde ya que se podrán aplicar multas económicas pero la idea principal del Municipio no es la recaudación, sino poder llevar todas las causas a penas accesorias, evitando el pago de multas a menos que sea estrictamente necesario. “Las penas económicas se cobran a través de módulos, que es una unidad de medida. Un módulo equivale al 3% del salario mínimo del empleado de menor rango ingresante en la planta municipal. Sería un total de $370, a día de hoy, cada módulo”, explicó Grams.
Esto supone entonces que, de no quedar alternativa y tener que aplicar una multa económica, el valor a pagar se regirá por la cantidad de módulos que fije el Juez de Faltas. Para tener una idea, sería $370 multiplicado por los módulos dispuestos en el juzgado.