Enzo Fernández, futbolista de la Selección argentina y Benfica de Portugal, se convirtió en la figura deseada del mercado de pases y, luego de que el club dueño de su pase aceptó negociar su venta, el Chelsea se posiciona como favorita para contar con sus servicios.
Tras el Mundial de Qatar 2022 en el que el mediocampista alzó la Copa y fue premiado como el jugador joven revelación, Fernández despertó el interés de los clubes grandes de Europa que hicieron distintos sondeos, pero no lograron apetecer la jugosa cifra de 120 millones de euros que vale su cláusula de salida.
Si bien los primeros en manifestar su interés fueron Liverpool y Real Madrid, finalmente el que picó en punta es el Chelsea, que avanza firme en su reconstrucción tras la turbulenta salida de su anterior dueño, el ruso Román Abramóvich, y Fernández podría convertirse, a los 21 años, en el eje del equipo que milita en la Premier League.
Más allá de haberse mostrado infranqueable en un comienzo, el club portugués que hace seis meses le compró a River el 75% del pase, está al tanto que ni su elevada cláusula de recisión es algo que podría frenar a las entidades más importantes del mundo, por lo que, en las últimas horas, hubo un cambio de postura y la directiva del Benfica aceptó negociar por el mediocampista.
En este contexto, Benfica abrió las charlas con el Chelsea, que ofrece un monto superior al de la cláusula -serían 127 millones-, pero, a diferencia de lo que implicaría abonar la recisión unilateral, la intensión de la institución de Inglaterra es negociar formas de pago para no tener que poner todo el dinero de una sola vez, algo imposible para los Blues.
Por su parte, Fernández se refirió a la posibilidad de ser vendido: “Ahora no sé nada, de eso se está encargando mi representante. No me quiero meter en el tema. Estoy enfocado en Benfica, que dentro de pocos días tenemos un partido importante”.
En caso de que se concrete la venta, a River -que ya embolsó 14 millones de euros- le corresponderán 31.750.000, que, sumado a lo que ya cobró, daría un monto total de casi 46 millones de euros, lo que lo transformaría en récord absoluto para el fútbol argentino.