Brenda Gasparri, numeraria de la Policía local, estará sentada en el banquillo de los acusados frente a un jurado integrado por vecinos. Será juzgada por el homicidio de Mauro Garfagnoli, ocurrido en 2018, cuando este intentaba huir de un control policial.
De la redacción de El Norte
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Comienza este miércoles a ser juzgada la conducta de Brenda Gasparri. Un grupo de vecinos especialmente designados evaluarán el accionar de la agente policial acusada de efectuar el disparo mortal que terminó con la vida de Mauro Garfagnoli, el 10 de marzo de 2018, mientras este intentaba huir de un control prevencional en el barrio San Francisco.
Un grupo de 12 personas integran el jurado que tiene a su cargo la evaluación de los testimonios y del material probatorio colectado por las partes que buscan reconstruir la verdad de lo sucedido el día del crimen. El juicio se extenderá por dos jornadas y una vez dictado el veredicto de culpable o inocente serán los jueces técnicos quienes determinen el monto de la pena en otra audiencia especial posterior.
Los hechos
Mauro Garfagnoli, escapando del control policial, había buscado refugio en su vivienda hasta donde lo siguió Brenda Gasparri, quien por entonces tenía 26 años. Allí se produjo un enfrentamiento en el que la numeraria efectuó el disparo que impactó en la víctima. Conforme a los testimonios, a pesar de los intentos de reanimación cardiopulmonar efectuados por la agente policial, el hombre murió.
Según las pruebas periciales, la bala habría ingresado deformada al cuerpo del prófugo, lo que daría cuenta de que habría rebotado de forma previa. Los estudios toxicológicos arrojaron que el hombre tenía cocaína y alcohol en sangre.
La Fiscalía solicitó prisión perpetua para Brenda por abuso de función. La defensa sostiene la absoluta inocencia y el debido y valeroso obrar. La mujer se encuentra actualmente con prisión preventiva y salidas laborales trabajando en una panadería de esta ciudad y se espera que dé por primera vez su declaración ante el jurado popular.
Antecedentes
Mauro Garfagnoli, alias el “Negro”, era un sujeto con frondosos antecedentes que al encontrarse con un operativo policial intentó evadirse. Sobre él pesaba un pedido de captura activa del penal de Baradero en el que purgaba una condena por robo con régimen abierto y al que no había regresado luego de una salida transitoria. Además, contaba en su historial con la comisión de numerosos hechos delictivos cometidos en la zona. Tenía 38 años, era oriundo de Fighiera, pero estuvo radicado en Rosario durante largos años y también en San Nicolás. Entre otros hechos estaba acusado junto a su hermano de haber ingresado la noche del 11 de julio de 2015 de manera violenta y sorpresiva por la parte trasera de la vivienda de Zupanovich, un productor rural cuya finca estaba ubicada en la zona de Empalme, con la intención de apropiarse “ilegítimamente de las pertenencias” de la víctima. En esas circunstancias se produjo un intercambio de disparos entre los asaltantes y la víctima, la cual recibió dos disparos, uno en la pierna izquierda y otro en la zona abdominal que le ocasionó la muerte tres días después.
Los hermanos Mauro y Fernando “Cacha” Garfagnoli estaban acusados de integrar bandas dedicadas a más de una decena de golpes en el sur de Santa Fe y el norte de Buenos Aires. Mauro estaba sindicado de ser el líder de la gavilla y les atribuyeron asaltos a una tienda de Empalme, a dos cerealeras de Pavón y General Conesa y a un restaurante de Theobald.