La concejala Alejandrina Borgatta, preocupada por el mal momento que vive el sector comercial y pymes “no esenciales”, presentó una iniciativa que busca asistirlos económicamente.
Se extiende a cafeterías, heladerías, bares, restaurantes, gimnasios, peluquerías, salones de fiesta, de deporte, culturales y servicios de fotografía y producción audiovisual.
La edil justicialista propone al Departamento Ejecutivo el Programa de Asistencia al Comercio (PAC) que, ante la pandemia de coronavirus, debieron cerrar sus puertas o restringir sus horarios.
Entiende que “hay que volver a ayudarlos”, recordando que desde el Gobierno nacional se dieron los Repro II para clubes y pymes y desde el Gobierno provincial, subsidios de hasta $ 50.000. A pesar de esta mínima ayuda, muchos comercios siguen endeudados y con muchos problemas de sostenerse o volver a abrir.
Lo que pretende Borgatta es un nuevo subsidio que salga del Municipio y que llegue a los $ 30.000 no reintegrables para quienes cumplan una serie de requisitos, como la habilitación municipal y/o constancia de inscripción, cuenta bancaria, no tener deudas de impuestos al mes de mayo de 2021, entre otras medidas excluyentes.
La concejala justicialista expresó que hay que estar “preparados para cuando se pueda remontar la economía”, imaginando que con la población mayormente vacunada, las restricciones serían mínimas o nulas.
