Así revelaron salones de fiestas de la ciudad a este medio tras ser consultados por un promedio de 150 invitados, teniendo en cuenta los servicios básicos que provee el salón y el servicio gastronómico. El importe puede encarecerse con la suma de pantallas y DJ, entre otras posibilidades.
De la redacción de EL NORTE
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Fecha emotiva si las hay, los 15 años de una adolescente acarrean consigo un sinfín de anhelos y expectativas de disfrutar una noche inolvidable junto a seres queridos. Sin embargo, la pandemia puso un ‘parate’ en la vida de todos: los encuentros y festejos entre pares estaban completamente prohibidos. Por eso, como tantos otros, el sector de eventos sociales estuvo muy golpeado especialmente durante el período 2020 y hasta principios del 2022.
Muchas quinceañeras decidieron por ello postergar su gran día, otras optaron por hacer un festejo reducido teniendo en cuenta las restricciones que se aplicaban durante el 2021, e incluso esperar a que todo finalmente vuelva a la ‘normalidad’.
Por esto, EL NORTE decidió consultar a diferentes salones sobre cuánto aproximadamente se está cobrando hoy en día en San Nicolás, un evento de tales magnitudes como lo es una fiesta de 15. Se tomó en consideración un ‘festejo tradicional’, por lo tanto, el precio puede variar si se deciden sumar ciertas cuestiones al evento, o sacrificar otras. Los cálculos se basaron en una celebración de 150 invitados.
Un servicio que se presenta más accesible cobra su salón $80.000, el cual incluye seguridad, climatización, sillas vestidas, y todo el armado de las mesas. En relación a la gastronomía comienza en $3.800 por persona y se ofrece un menú básico, o como le llaman en el rubro, un ‘lunch’, para aquellos a quienes no les interese un plato elaborado.
Un servicio más exclusivo cobra el salón $140.000, e incluye el uso completo de las instalaciones, climatización, grupo electrógeno, seguridad, estacionamiento privado, vajilla, y mantelería de raso. Gastronómicamente hablando, se ofrece el método de los ‘5 pasos’ que consta de recepción, entrada, plato principal, postre y sobremesa. Éste comienza en $4.500 por persona e incluye gaseosas, soda, agua y cerveza.
En fiestas de lujo, debe tenerse en cuenta que el salón puede llegar a costar estimativamente $95.000, y el servicio gastronómico $11.000 por persona. Luego, una pantalla grande para pasar videos y fotos de la quinceañera vale cerca de $150.000. Y el Dj parte de una base de $100.000 actualmente.
Los impuestos SADAIC y AADI CAPIF –entidades que habilitan la reproducción de obras y fonogramas bajo derechos de autor– quedan por fuera de los gastos que incluye el salón.
Así, todo lo que se desee sumar encarecería el precio base expuesto, ya correría por cuenta de la quinceañera y su familia.
Estos gastos adicionales pueden relacionarse al vestido de la cumpleañera, maquillaje y peinado, fotógrafo, centros de mesa, decoración del salón. Como así también, cabina para fotos, maquillaje artístico, show o banda invitada, pata de ternera en sandwiches a media noche, pista de baile con luces led, etc. “Se pueden llegar a gastar sumas inentendibles”, comentaron fuentes consultadas.
Industria de eventos sociales
Este rubro fue de los más golpeados por la pandemia. Durante todo el 2020, la facturación de los salones de fiestas estuvo en cero. Recién en el verano del 2021 comenzaron a trabajar, por lo que se espera que este 2022 se termine de recuperar algo de lo perdido en los dos años anteriores.
En un período impregnado de incertidumbre, establecer una fecha en particular para llevar a cabo un festejo de tal envergadura y costos, no era para nada fácil. Se pasaba de la prohibición total de reunirse en familia, y después en determinados lugares. Posteriormente había un brote y se volvía sobre los pasos que se habían dado. Idas y vueltas donde las celebraciones parecían algo difícil de concretar.
“Muchos deciden realizar el pago por medio de tarjetas de crédito, para efectivizar la reserva de la fecha y pagar luego en partes”, expresaron las fuentes.
Un dato no menor a destacar es que más allá de las alzas en los precios que debieron realizarse por la pandemia, el rubro de eventos sociales tampoco escapó a la disparada inflacionaria que conduce a la actualización de sus precios.
No obstante, aunque actualmente las fiestas son más reducidas en cantidad de gente, todos desean festejar. Se evidencia una fuerte demanda ya que las familias no quieren postergar ningún tipo de festejo. Actualmente se prioriza el disfrute y la vida después de tanta monotonía conviviendo con la pandemia.
Desde el sector aseguran que al mercado le costará diez años recuperar su actividad a los números previos al Covid-19. Pero mientras tanto, avanzan los festejos con mayor confianza.