“Hace veinte años espero estar en frente del asesino de mi mujer”, comenzó la declaración del viudo Carlos Carrascosa, quien señaló al acusado Nicolás Pachelo.
Fue antes de comenzar con las preguntas por parte de la fiscalía, donde Carrascosa pidió la palabra: “Hace 20 años que espero este momento de ser particular damnificado y estar en frente del asesino de mi mujer”
Es la primera vez que Carrascosa declara como testigo en el tercer juicio por el crimen de María Marta García Belsunce. Los testigos, citados por la fiscalía, son clave. El viudo porque fue condenado primero por encubrimiento, luego por homicidio calificado y finalmente absuelto en un giro inesperado de la causa.
La masajista Michelini, en tanto, fue la segunda persona en ingresar a la casa aquél 27 de octubre de 2002 y asistió a la víctima en su último suspiro. La mujer fue luego acusada por el fiscal Diego Molina Pico por encubrimiento, por limpiar la escena del crimen, pero en el segundo juicio, que se realizó en 2011, fue la única absuelta ya que cambió su declaración original y hundió a toda la familia.
Lo curioso del caso Michelini es que en ese juicio fue asistida legalmente por Roberto Ribas, el abogado de Pachelo. En los pasillos de los Tribunales no se descartaba que la fiscalía pueda pedir para ella la detención por falso testimonio ya que sus contradicciones podrían quedar en evidencia.
Por el lado del viudo, volverá a la misma sala de audiencias donde en julio de 2007 fue condenado por el encubrimiento del crime, fallo que luego modificó la Cámara de Casación bonaerense y que finalmente terminó con la absolución en 2020 tras un fallo de la Corte Suprema.