“Estamos en un mundo de dueños, como lo vemos a escala mundial, lo vemos aquí; dueños que de alguna forma tienen la complicidad de los gobiernos y funcionarios”, expresó una integrante de la agrupación Salvemos los Humedales, tras un nuevo foco de incendio frente a nuestra costa. Un tema que requiere urgencia y profundidad en su tratamiento y que alcanza a los tres poderes del Estado.
Desde el martes la inmensa columna de fuego en la zona de las islas entrerrianas que pudimos ver frente a nuestra costa no hace más que generar indignación ante una situación que no cesa y a la cual no se atiende con la urgencia e importancia que merece. Sin ningún tipo de políticas preventivas, leyes proteccionistas y una Justicia que actúe sobre los responsables, quedan siempre, literalmente, en primera línea de fuego, los brigadistas que con su vocación de servicio se ven expuestos a jornadas riesgosas que podrían evitarse si se generaran acciones concretas para frenar este ecocidio con daños ambientales irreversibles.
Esta práctica incendiaria que se repite de manera constante registró –hasta ayer– un foco de fuego frente a nuestra ciudad de un área de 2740 hectáreas, una superficie mayor a toda Villa Constitución que en su casco urbano tiene 1530 hectáreas.
“Es tristísimo, estamos seguros de que esto se podría haber prevenido, porque en agosto del año pasado, la respuesta de Nación con respecto a una causa federal por el tema de los incendios fue la creación de los Faros de la Conservación, que más allá de discutir su operatividad en los teórico, lo cierto es que no funcionan”, declaró en diálogo con Diario EL SUR Fernanda del Carlo, integrante de la agrupación Salvemos los Humedales e integrante de la Comisión Preservadora de la Reserva Isla del Sol.
“Un mundo de dueños”
“La lectura que podemos hacer de estos grandes incendios es que se acercan a una especie de lenguaje mafioso de empresarios, donde una vez más uno puede confirmar que estamos en un mundo de dueños. Eso que uno puede ver a gran escala mundial de poderosos del mundo, también se puede ver acá, a escala más pequeña, que estamos en un mundo de dueños que tienen de alguna forma la complicidad de los gobiernos, funcionarios, jueces”, afirmó Del Carlo.
Como primera imagen, como primer registro visual de lo que está sucediendo, expresó: “Es muy doloroso lo que pasa, ver esa nube gigante de humo frente a nosotros”.
Y ante esta situación repetida, desde la agrupación vuelven a recordar que hay un vacío legal y “mientras no existe una figura que condene con prisión a esos empresarios y a sus cómplices, esto va a seguir sucediendo” (ver nota sobre Delito Ambiental).
Información
Una prueba contundente de que los incendios pueden ser evitados, detectados a tiempo, incluso sin la existencia de Faros de la Conservación, es, por ejemplo, una página web: www.geamap.com, que registra los incendios en el mundo, sitio que permite identificarlos con coordenadas e información precisa de dónde está ubicados los focos de fuego; incluso permite identificar las casas y poblados cercanos a los incendios. Con esto se apunta a visibilizar que ante tanto acceso a la información al alcance de todas las personas con solo un teléfono celular, no hay justificación posible para que el Estado no cuente con maneras efectivas de prevenir los focos ígneos.
“Si cualquiera puede tener acceso a esta información, ¿qué pasó en todo este tiempo?”, exclamó Del Carlo en referencia a las acciones preventivas necesarias para evitar, como el caso de esta semana, un incendio de más de 2700 hectáreas.
Si bien es sabido que la quema en las islas es una práctica que lleva más de 20 años realizándose, con la evolución informática de todos estos años, “si existiera la voluntad política para disponer de medios preventivos, no se llegaría a estas consecuencias”, sostuvo la integrante de Salvemos los Humedales.
“No hace falta un Faro de Conservación que avise que hay un punto de calor, porque ya existen herramientas informáticas para identificarlos. Porque ahora, sin acciones preventivas, hasta que alguien de Prefectura o un bombero ve el fuego y da aviso, deben seguir todo un protocolo que hasta concretarse la acción, se quemó todo”, agregó.
La ciudadanía
Desde la agrupación insisten en que esta situación se viene repitiendo desde hace años, en donde “más allá de la bajante y de la sequía hay gente poderosa que está en terrenos de la zona de islas, haciendo sus negocios y suceden estas cosas”, dijo y recordó la experiencia local de empresarios holandeses que años atrás modificaron gran parte del ecosistema natural de la zona para lograr tierras destinadas al agrocultivo en la zona de islas.
“Para que esto suceda, debe existir una trama de complicidades entre los dueños de las tierras, el poder político y el Poder Judicial; por eso sostengo que estamos en un mundo de dueños, y mientras esto sea así, la ciudadanía va a seguir estando en un lugar secundario; la Justicia llega tarde, la política llega tarde”, aseguró al tiempo de recordar que ya hace muchos años que científicos de todo el mundo afirman que los humedales son reservorios de agua dulce.
Cinco mil focos de fuego
Luego de un 2020 récord, los incendios nunca se interrumpieron en el humedal y al no haber agua por la bajante del río Paraná toda el área está muy seca y eso agrava el panorama, ya que lo propicia para las quemas intencionales. En lo que va del 2021, ya se registraron 5000 focos de fuego en la región. En tanto, el año pasado se quemaron cerca de 500.000 hectáreas del delta del Paraná.