SANIDAD: CONCILIACIÓN OBLIGATORIA HASTA EL MARTES

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Trabajadores de la sanidad siguen reclamando por un salario digno y acorde a la situación que estamos viviendo. En la mañana del jueves pasado, profesionales pertenecientes al gremio ATSA realizaron una manifestación donde buscaron dejar en claro que no están conformes con la falta de acuerdos con los dueños de nosocomios privados.

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En la jornada de hoy, los pertenecientes a dicho gremio estaban por efectuar un paro de 24 horas en relación con la atención no urgente. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria hasta el próximo martes 3 de agosto y eso no dejó contentos a los trabajadores.

“El  Ministerio  de  Trabajo  de  la  Nación  decidió  prorrogar  la conciliación obligatoria dictada el día 30 de junio hasta el martes 3 de agosto. Consideramos que esta decisión es injusta e ilegítima. No es posible impedir la realización de medidas de fuerza cuya  única  finalidad  es  conseguir  la  actualización  de  los  salarios básicos de todos los compañeros del Sector Asistencial cuando hace más de dos meses que nos encontramos negociando de buena fe y los empresarios se niegan a formular una propuesta. La Resolución del Ministerio no hace más que dilatar la solución de un conflicto salarial. Vamos a seguir presionando y vamos a potenciar las medidas de acción sindical. Ninguna Resolución Administrativa va a detener la fuerza de los trabajadores  que  reclaman  una  justa  recomposición de  los salarios”, comienza un comunicado de prensa del gremio.

“Vamos a realizar el Paro Nacional de actividades por 24 horas para  el  próximo  día  miércoles 4  de  Agosto  y  lo  vamos  a acompañar con una Gran Marcha Nacional por las calles de la ciudad de Buenos Aires, para que todos puedan comprender la justicia de nuestro reclamo y acompañar a todos los trabajadores de la Sanidad en su lucha. Si peleamos contra la pandemia, como no vamos a pelear contra la mezquindad de los empresarios. Que el gobierno y los empresarios presten atención, que nadie se haga el distraído y que cada uno asuma sus responsabilidades, cuando una injusticia social alcanza esta dimensión es porque no son reales las prioridades que se declaman”, continúa el mismo.