En la última sesión ordinaria celebrada en el Honorable Concejo Deliberante el pasado jueves, entre los expedientes tratados se aprobó un nuevo reglamento para los cementerios de la ciudad de San Nicolás. El proyecto generó polémicas y muchas discusiones entre los concejales, e incluso la votación terminó empatada y tuvo que definir -en este caso de manera afirmativa- el presidente del HCD Sergio Ponce.
De la Redacción de El Norte
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Desde el ingreso del expediente N° 17.530 propuesto por el Ejecutivo, el cual plantea un nuevo reglamento para los cementerios de San Nicolás, se originaron opiniones contrapuestas antes y durante su tratamiento en el Honorable Concejo Deliberante. ¿Qué es lo que dice la ordenanza y cuáles son las críticas que hacen desde la oposición y parte del oficialismo?
Según el propio proyecto, el reglamento tiene por objeto sentar las bases de la política mortuoria de la Municipalidad de San Nicolás de los Arroyos; establecer la normativa aplicable que regule el funcionamiento de los cementerios públicos y privados del partido; y ordenar los alcances del ejercicio del poder de policía mortuoria dentro del ámbito de la competencia municipal.
“Se prevé que la política mortuoria del municipio de San Nicolás de los Arroyos se establecerá sobre la base de los siguientes principios: garantizar la dignidad en el trato y respeto al difunto y a los deudos; resguardar la oportunidad de entierro digno para todos los habitantes de la ciudad; asegurar el respeto por los diversos cultos, religiones, costumbres y creencias; promover el mantenimiento de la Higiene Ambiental; realzar el valor patrimonial y cultural de las Necrópolis del municipio de San Nicolás de los Arroyos; incentivar y propender a mejorar la calidad en la prestación de los servicios funerarios públicos y privados; generar mayor eficiencia, autosuficiencia y sustentabilidad en la administración y explotación de los Cementerios Públicos”, reza en los considerandos.
Y agrega que “el proyecto declara al servicio mortuorio como una prestación de carácter regular, continua, y esencial, que debe brindarse en forma compatible con la calidad ambiental, mediante la utilización de tecnologías no contaminantes y a través de un manejo racional en el tratamiento y disposición de residuos inherentes a la actividad mortuoria”.
Críticas
Las críticas al proyecto las realizaron los diferentes bloques opositores y el oficialista Danilo Petroni en los debates suscitados en el recinto. “Este proyecto cuenta con dos despachos, pero quiero argumentar el nuestro que es el propuesto por minoría. Hoy queremos que se cite a las Asociaciones de Inmigrantes para que nos cuenten el inconveniente o la petición que ellos tienen para con esta ordenanza”, afirmó Muriel Engelbrecht.
Por su parte, Danilo Petroni manifestó: “Me sigo reuniendo con personas pertenecientes a las asociaciones de inmigrantes, que siguen insistiendo en que este reglamento es perjudicial y se les debería dar la posibilidad de que nos cuenten de qué manera se podría implementar el reglamento sin que ellos sean afectados”.
“De acuerdo con las entidades, los panteones les pertenece y no corresponde que paguen derecho de cementerio porque fueron donadas sin cargo por el municipio en aquel momento. Este planteo se lo hicieron a los concejales Pastocchi, Engelbrecht y a mí. En la comisión planteamos esta situación sin opinar sobre el particular. O sea, planteamos los dichos por las entidades y recomendamos que se los citara a la comisión a las entidades y al autor del proyecto (el Ejecutivo). Esta recomendación no se tuvo en cuenta y se despachó por la aprobación”, afirmó Petroni a este medio.
A la hora de la votación, hubo empate de 10 a 10 (ya que Petroni votó en contra de su aprobación), por lo que se debió apelar a Ley Orgánica de Municipalidades, artículo 83 inciso 3, artículo 75 y artículo 115, el cual le otorga la potestad al presidente del Concejo de volver a votar. El expediente fue aprobado por mayoría absoluta, con el voto negativo de Unidad Ciudadana, Frente Renovador, Frente de Todos y de Danilo Petroni.
