La Comisión de Homenaje organizó actividades desde la semana pasada. Ayer, en la Catedral hizo entrega de una ofrenda floral y hubo una conferencia de prensa con la presencia de la sobrina de quien fuera prelado de la Diócesis de San Nicolás por 11 años –y querellante en la causa judicial– Marisa Ponce de León. “Pedimos la pronta resolución de la investigación. No queremos que siga impune”, solicitó.
De la Redacción de EL NORTE
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En la jornada de ayer se desarrollaron diversas actividades en conmemoración de los 45 años del fallecimiento del obispo Carlos Horacio Ponce de León. La organización estuvo a cargo de la Comisión de Homenaje. En la Iglesia Catedral se realizó la entrega de una ofrenda floral y hubo una conferencia de prensa con la presencia de su sobrina –y querellante en la causa judicial– Marisa Ponce de León. También hizo declaraciones Adela Antokoletz, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.
“Creo que la sociedad, y la comunidad nicoleña en especial, merece saber la verdad”, expresó Marisa Ponce de León, y agregó: “Estamos esperando qué nos dice la Justicia, sabemos que es muy lenta, pedimos la pronta resolución. Es un pedido que nos unamos todos para lograr esta meta. No queremos que siga impune”.
“Las pruebas son irrefutables”
Hasta ahora, la investigación sigue bajo la denominación de “homicidio culposo en accidente de tránsito”, según expresaron los familiares. El pasado 1° de junio, en la Cámara de Apelaciones de Rosario, se presentaron más pericias accidentológicas, que apuntan a cambiar la carátula.
“Se hizo una audiencia, donde nuevamente se mostraron estas pruebas, que tienen fundamento matemático, físico y lógico. Son irrefutables. Fue un accidente con intencionalidad, ya se descartó el accidente vial fortuito. Mi padre nos dijo que así nunca pudo haber sido un accidente. Tuvimos que esperar la democracia, y en 2004 el fiscal Juan Murray logró reabrir la causa. Tengo recuerdos muy claros de mi tío. Fue amenazado, perseguido, y así siguió con su tarea”, sostuvo Marisa Ponce de León.
Adela Antokoletz
Por su parte, Adela Antokoletz expresó: “Conocemos familias y personas que siguen iluminadas por la luz de este gran obispo. Atendió a los presos políticos, Cholo (Budassi) le debió su vida. Cholo recogió el espíritu amplio del obispo mediante los encuentros regionales, con 12 o 13 ciudades. Trabajar con paciencia y diálogo para seguir construyendo. Las madres tomamos este caso que necesita justicia concreta. Está muy demorado, no se eleva a juicio oral y público. Aquí hubo pericias objetivas que demuestran que no fue un accidente. En la dictadura hubo una metodología de asesinar obispos, Angelelli también llevaba documentación muy comprometida”.