Luego del impasse ocasionado por la inasistencia de integrantes para el jurado popular, está previsto que hoy desde las 8 horas se reanude la actividad en el Palacio de Tribunales para esclarecer los hechos que derivaron en el femicidio de la joven Ángela Leonela Barrios. Fabián Andino está acusado de haber cometido el crimen, mientras que su hijo Jonathan está presumido como facilitador.
Carolina Mitriani
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El pasado 9 de junio estaba marcado para el comienzo del juicio oral que busca determinar los hechos y actores que arrebataron la vida a la joven nicoleña Ángela Leonela Barrios, víctima de femicidio en el año 2016. Sin embargo, esto se vio truncado tras más de siete horas de tareas del Tribunal Criminal 1 para la afirmación del jurado popular.
Hasta cerca de las 15 horas se intentó a través de distintas vías avanzar hacia las siguientes instancias, pero la incompletud de esta cuestión básica derivó en la imperiosa necesidad de postergar el proceso. Por una destacada voluntad de las partes involucradas en el caso –tal como destacó el abogado de la familia de Ángela, Dr. Agustín Tanús- se logró que hoy se reanude la actividad.
Está previsto que la presentación de las audiencias abarque toda la jornada de este lunes y al menos el martes. En caso de ser necesario, la Justicia tiene la posibilidad de extender sus tareas para completar todo el proceso de exposiciones.
El Dr. Tanús valoró que el primer encuentro en Tribunales “no fue un día perdido porque llegamos a 28 jurados. Si no llegábamos a ponernos de acuerdo, teníamos que volver a foja cero y esperar un nuevo turno de juicio. Se avanzó, así que el 27 vamos con todo”. Para esta instancia se han convocado a nuevos ciudadanos del departamento judicial, a través del método de sorteo por padrón, para ampliar la cantidad de jurados disponibles y evitar que “se caiga” el proceso. En caso de que los convocados no se presenten a las 8 horas en el Palacio de Tribunales, serán buscados por la fuerza pública.
El caso
El cuerpo de la joven de barrio Virgen del Rosario fue hallado sin vida nueve días después de desaparecida, a través del sistema de búsqueda con caninos que llegaron especialmente de La Plata para participar en los rastrillajes. Fue vista por última vez el 21 de septiembre del 2016 a las 22:30 horas, cuando se retiraba de su domicilio de calle De La Nación para celebrar con amistades el día de la primavera.
Su cuerpo fue hallado en la tarde del 30 de septiembre del 2016. Estaba ubicado en una zona de descampados, en inmediaciones del Cementerio Parque, cercano a la rotonda que conecta a la ciudad de San Nicolás con La Emilia.
Presentaba un avanzado estado de descomposición y múltiples heridas de arma blanca, que según los peritajes habrían sido principalmente desde la espalda, provocando una de ellas el punto final a su vida tras alcanzar su corazón. Además, su cabeza se encontraba separada del cuerpo; aunque los investigadores no descartaron que pudiera ser por ataque de animales, en la más de una semana que estuvo en ese lugar.
Los restos de la joven Ángela Leonela, de tan sólo 18 años, manifestaron la defensa que mantuvo para evitar el ataque del agresor o los agresores. En las pericias que se conocieron en los primeros días del suceso no se evidenciaron signos de violencia sexual. El móvil de robo fue descartado en la carátula porque sus pertenencias no fueron sustraídas.
La línea investigativa conduce a que Ángela fue citada o engañada a este descampado, donde el mismo día de su desaparición fue asesinada. Al no presentar signos de arrastre ni traslado todo indica que el crimen fue cometido in situ.
Implicados complicados
El principal acusado, Fabián Andino, fue detenido cuando los investigadores notaron inconsistencias en su declaración, al ser interrogado por la entonces fiscal Dra. Sandra Bicetti por ser la última persona contactada por la joven. Para chequear las últimas conversaciones que la joven había realizado a través de su celular debieron rescatar con especialistas informáticos un grupo de mensajes borrados. En ellos ubicaron la existencia de un vínculo con esta persona, que era su vecino, y constataron que acordaron encontrarse. El implicado había solicitado en uno de los mensajes revelados que borre los textos enviados y recibidos; sin embargo, la capacidad operativa permitió que salieran a la luz para ser un importante aporte.
Su hijo, Jonathan Jesús Andino, también aparece señalado en la causa aunque con menos implicancia, presumido como un facilitador de información para que su progenitor pudiera cumplir con el objetivo de dar muerte a Barrios. Se lo juzgará como partícipe secundario del femicidio.
La pena de expectativa, en caso de que se los encontrara culpables, sería de reclusión perpetua. Los dos acusados llegan a esta instancia en detención: Fabián Andino en la unidad penal y Jonathan Andino con domiciliaria. Se espera nuevamente un fuerte operativo de seguridad para su arribo a tribunales y para la protección de la identidad de los testigos y jurados del caso.