En el cierre de la gira europea, el seleccionado argentino superó a su par galés por 33 a 11, cumpliendo su mejor actuación a lo largo de estos tres test match que afrontó en el viejo continente. El equipo de Mario Ledesma terminó invicto.
El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas derrotó categóricamente a Gales por 33 a 11 (parcial 17-8), en el segundo test match disputado en el estadio Principitaly de la ciudad de Cardiff, y terminó invicto en su gira de tres encuentros por el viejo continente.
Los tantos argentinos ante el último campeón del torneo Seis Naciones se concretaron con los tries de Matías Moroni, Tomás Cubelli y Pablo Matera, más tres conversiones y cuatro penales del apertura Nicolás Sánchez.
Gales sumó con un try logrado por Owen Lane y dos penales Jarrod Evans.
El último triunfo de Los Pumas frente al equipo del “Dragón” fue hace nueve años y la victoria de hoy marcó el resultado más abultado en el historial, que ahora registra 13 triunfos británicos, 7 argentinos y un empate en 21 enfrentamientos.
Precisamente la única igualdad se produjo el sábado pasado con el 20-20 en el mismo escenario de ayer, que fue el segundo compromiso de una gira iniciada una semana antes con victoria sobre Rumania por 24 a 17 en Bucarest.
Los Pumas cerraron la ventana de julio con una victoria contundente, un balance positivo y un fuerte impulso de cara a la parte más exigente de la temporada, aun con mucho por mejorar.
El seleccionado argentino se asentó sobre las bases históricas de su juego para doblegar con autoridad a Gales, el campeón del Seis Naciones, un equipo diezmado en figuras (12 jugadores afectados a la gira de British & Irish Lions) pero sólido en funcionamiento. El éxito refleja el dominio que ejercieron los argentinos durante los 80 minutos: el scrum fue imponente, los forwards ganaron metros cada vez que tomaron contacto con la pelota con Rodrigo Bruni a la cabeza y se asentaron en una defensa hermética y agresiva, lo mejor de la gira.
Los Pumas cierran así una serie en la que fueron de menor a mayor, que comenzó con dudas con un triunfo agónico ante la débil Rumania, siguió con un empate agridulce ante Gales y se termina con un éxito contundente en la revancha, que deja satisfacción por el resultado pero sobre todo por la forma en que se consiguió.
El contexto no ayudó, con jugadores al final de una temporada larga, que volvieron a reunirse después de ocho meses y debieron ponerse en sintonía rápidamente. Es la nueva realidad que le toca al rugby argentino y no es válida como excusa. La selección de jugadores, sin mucha rotación, deja en claro que Mario Ledesma no tendrá contemplaciones. En un templo del rugby como el ex Millennium, los Pumas demostraron carácter y jugaron a la altura que exige la Celeste y Blanca.
El éxito ante Nueva Zelanda y el buen Tri-Nations global a fines de 2020 confirmaron el lugar que, por jerarquía individual, le cabe a este equipo. Reafirmarlo en cada partido no es sencillo. Ayer lo hicieron.
Ahora, en menos de un mes, el 13 de agosto, Los Pumas inician la parte más exigente de la temporada: el Rugby Championship, que arranca con dos partidos en Sudáfrica ante los Springboks. Los campeones del mundo llegarán con tres Test Matches ante los Lionssobre sus espaldas. Los de Ledesma tendrán un breve descanso y una mini pretemporada. Y la certeza de una base sólida, un terreno fértil a partir del cual crecer.
Samoa, rival para el Mundial
El seleccionado de Samoa se clasificó para jugar la Copa del Mundo de Rugby 2023, en donde integrará el Grupo D junto a Argentina, al vencer en esta madrugada a Tonga por 37 a 15 en un cotejo jugado en el FMG Stadium de Hamilton.
Samoa ya había ganado el primer cotejo jugado la semana pasada en Auckland por 42 a 13, alcanzando un resultado global de 79 a 28, por lo tanto hoy se hubiese clasificado hasta perdiendo por 28 puntos.
La victoria significa que los samoanos participarán en el Grupo D del mundial junto a Inglaterra, Japón, Argentina y el clasificado de América 2 (Estados Unidos, Canadá o Uruguay).
Samoa jugará ante Los Pumas en Francia 2023 el 22 de setiembre en Saint Etienne y será la cuarta vez que se enfrenten en una copa del mundo, con dos triunfos los oceánicos (35-12 en 1991 y 32-26 en 1995) y uno argentino (32-16 en 1999).
