El irlandés Conor McGregor, figura de las Artes Marciales Mixtas (MMA), sufrió una impresionante fractura en su pierna izquierda y perdió su tercer combate ante el estadounidense Dustin Poirier en el T-Mobile Arena de Las Vegas, con la presencia del expresidente Donald Trump.
El combate fue detenido en el final del primer asalto cuando McGregor retrocedió en el ring y se torció de manera impactante la pierna, luego de fallar un golpe destinado a su rival.
Los promotores de la velada informaron después que McGregor sufrió la lesión en la parte inferior de la tibia, por la que decidieron operarlo después del combate.
Esta pelea, a cinco asaltos, debía resolver el empate entre McGregor, excampeón de dos categorías de la Ultimate Fighting Championship (UFC), y su eterno rival Poirier.
En 2014, McGregor noqueó a Poirier en menos de dos minutos y en enero el estadounidense se tomó la revancha con un nocaut en el segundo asalto.