El jurista y exjuez de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni afirmó que “los derechos humanos son un instrumento para la liberación” y advirtió que “se debe conservar esa idea porque la ideología contraria es la colonialista, en su versión adaptada a la ideología neoliberal”.
Además, Zaffaroni sostuvo que actualmente hay “formas más sutiles de control social” y puso como ejemplos “el lawfare y los monopolios y oligopolios de los medios de comunicación”.
El exmiembro de la Corte formuló estos conceptos al exponer en el ciclo Semana de la Memoria por la Verdad y por la Justicia del Instituto Universitario Nacional Madres de Plaza de Mayo (IUNMa), del Ministerio de Justicia de la Nación.
“Los derechos humanos son un instrumento para la liberación. La idea de los derechos humanos surge de la lucha contra el colonialismo. Se debe conservar esta idea porque la ideología contraria es la colonialista, en su versión adaptada a la ideología neoliberal”, enfatizó.
Entonces amplió que que “para evitar el riesgo de que se deforme y se destroce la esencia del discurso de los derechos humanos debemos conservar la idea de los derechos humanos para la liberación”.
Zaffaroni memoró que “esto comienza a fines del siglo XV”, con la conquista de América y “los dos lados del Atlántico se conocieron mejor”.
“Ahí se presenta el mundo de relaciones humanas con el primer gran genocidio, que se cargó entre 50 y 60 millones de personas, que se concretó después con la trata esclavista”, sostuvo el jurista, quien destacó que “en ese momento se produce el gran debate sobre los derechos humanos entre Bartolomé de las Casas y Ginés de Sepúlveda”.
De Sepúlveda “enuncia la idea que siempre ha de cubrir todos los genocidios, de que la guerra es justa”, en ese caso contra los indígenas, mientras De las Casas “responde que los indios eran merecedores del respeto a la propiedad, a sus mujeres, de la devolución de sus templos, de sus cosmovisiones”.
También dijo que entonces había “una Europa pobre y diezmada, arrinconada por los islámicos, que se lanza sobre América, se empodera con la plata el oro y la materia prima. Ese es el colonialismo originario. Después se lanza sobre África y Asia y empieza una etapa de neocolonialismo y nacional-colonialismo, donde se enfrenta la propia Europa en una guerra brutal”.
Añadió Zaffaroni que “en la Segunda Guerra Mundial vimos que a uno de los contendientes se le ocurre decir ‘voy a hacer lo mismo’ y como una producción en serie surge la Shoá”, en referencia a la matanza de seis millones de judíos por parte del nazismo.
Explicó que “el colonialismo después pierde fineza y cae en cuestiones mas rudimentarias como el racismo, por ejemplo”. Con el correr del tiempo, indicó, “se abre una etapa de letargo del colonialismo y aparece la ideología neoliberal, que está en la antípoda de cualquier premisa de derechos humanos”.
Zaffaroni abundó diciendo que “el marco del poder no es hoy es de hace 60 o 70 años; el marco de poder planetario lo tenían los políticos del hemisferio norte, pero estos han perdido la capacidad de poder, que pasó a organismos de poder tecnocrático, como el FMI”.
El exjuez rescató la encíclica “Laudato Si” del papa Francisco, donde “dice que esto no se sostiene, que no se sostiene el capitalismo financiero, y en ese marco tenemos que repensar” diversos paradigmas, especialmente en la región.