El ministro de Seguridad, abogó la teoría de que la oficina de Cristina Fernández fue “marcada” durante las manifestaciones.
“Se marcó primero la oficina para que después el grupo grande se dedicara a cualquier cosa y el grupo chiquito, específicamente a agredir la oficina de Cristina. No tengo dudas, estoy convencido de eso”, manifestó Fernández en una entrevista con La Red esta mañana.
El ministro habló sobre “premeditación” de los hechos y para señalar las marcas utilizó una referencia bíblica; “Las marcas rojas hasta nos traen reminiscencias de las marcas de las casas con sangre de cordero”.
Por otro lado desligó de responsabilidad a las agrupaciones que en ese momento protagonizaron la manifestación: “No creo que sean las organizaciones. Porque en el mismo momento sobre la calle Entre Ríos, o Rivadavia, había un montón de partidos de izquierda manifestándose y haciendo bulla, pero ninguno movió nada”.
Además, resaltó la ausencia de vallas en el Palacio y negó conocer quién dio la orden. “Yo las hubiera puesto, las vallas hubiesen hecho todo mas fácil”, sostuvo y manifestó que deberían estar esta semana durante el debate en el Senado.
“Cualquiera de las cosas que se quieran pensar, se pueden pensar. Porque esto es libre, nadie puede tener una visión concreta de lo sucedido porque estamos tratando de dilucidarlo”, concluyó sobre las versiones que circulan sobre un “auto atentado”.