Solo un 17% de los argentinos aumentó el nivel de consumo. Y 7 de cada 10 priorizaron marcas que conocen, según la consultora Taquion Research.
En medio de la fuerte caída del poder adquisitivo, que en la era de Javier Milei retrocedió 32,1% según un estudio del Centro de Investigación y Formación de la República Argentina de la CTA, 6 de cada 10 argentinos consumen menos, postergan compras de bienes durables y priorizan marcas que conocen por sobre el precio.
Los datos se desprenden del primer ‘Monitor Nacional sobre Retail y Consumo’ de la consultora Taquion Research, que da cuenta de cómo, por la caída de poder adquisitivo, la clase media recorta gastos en consumos cotidianos y “gustos” que antes se daba.
De acuerdo al informe, el 60% bajó su nivel respecto de 2023. De ellos, un 36% lo hizo significativamente y un 24%, ligeramente. Mientras, un 23% lo mantuvo estable y un 17% lo aumentó.
Otros de los datos que encienden una luz de alarma son que algo más de la mitad de los argentinos considera que su capacidad de consumo es peor que hace un año, mientras que el 72% tiene ingresos por debajo de la inflación, el 55% tiene deudas y el 51% usó ahorros para pagar gastos.
Pese a estos números preocupantes, la imagen de la administración libertaria sigue siendo relativamente buena. “Así y todo, se mantiene la tolerancia al Gobierno, a quien todavía no se le atribuye toda la responsabilidad por la situación económica. Hay una actitud positiva al ajuste”, analizó Sergio Doval, CEO de Taquion.
En tanto, se registró una postergación de consumos de largo plazo. En los últimos tres meses, un 64% adquirió una prenda de ropa o calzado y solo el 39% un electrodoméstico o tecnología.
Otro dato que arroja el estudio de Taquion es que los consumidores se inclinan por productos conocidos. En ese sentido, el 70% que elige marcas que conoce tanto en compras del día a día como en las que requieren un esfuerzo económico mayor. En comestibles, la preponderancia es del 84%.