El Náutico completó una campaña notable y fue protagonista de comienzo a fin. Se quedó a las puertas del ascenso a la Liga Argentina, pero desde lo institucional y lo deportivo demostró estar preparado para dar el salto al siguiente nivel del baloncesto nacional.
De la Redacción de EL NORTE
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Con el dolor latente en sus hinchas por las ajustada caídas sufridas frente a El Talar de Capital Federal, no quedan dudas de que Regatas estuvo más cerca que nunca de ascender a la Liga Argentina. En su cuarta temporada consecutiva en la Liga Federal, hizo todos los deberes tanto dentro como fuera de la cancha como para dar el salto al segundo escalón del baloncesto nacional. Es más, apenas detalles –y algunas situaciones extradeportivas cuanto menos polémicas- separaron al club del tan ansiado sueño del ascenso. Para el que tanto invirtió (tiempo, trabajo y dinero) y se preparó. Inclusive corrigiendo algunos errores que creyeron en la institución de la ribera que se habían cometidas en las anteriores campañas, sin dejar cuestiones libradas al azar, tanto en lo organizativo como en lo deportivo (después de lo que habían dejado las eliminaciones con Provincial de Rosario en 2022 y ante Bochas de Colonia Caroya en 2023). Cierto es que con algunos imponderables no se puede lidiar. Y rondan las sospechas en el club de que hubo alguna “mano negra” que quiso que Regatas no suba de categoría (sin que esto signifique que El Talar no hizo los méritos suficientes para conseguir este logro). Aun así, el equipo dio pelea hasta el final, contra viento y marea.
En una competencia tan extensa y exigente, el final terminó siendo injusto para el Náutico. Muchos podrán decir que la única verdad es la realidad, pero en este caso esa máxima no encuadra con lo que Regatas generó. Y con lo que fue un rendimiento notable de comienzo a fin en el torneo, del que se despidió con dieciséis victorias y cuatro derrotas.
En la fase regular el conjunto dirigido por Pablo Dastugue fue el mejor del Grupo B de la Conferencia Sudeste, habiendo ganado diez de sus doce encuentros. Luego, en play-offs Regatas eliminó con autoridad a Kimberley de Mar del Plata, Ferro de General Pico y Pacífico de Neuquén, a los que superó por 2 a 0 en todos los casos, llegando a obtener once triunfos consecutivos (seis de ellos en los play-offs). En la final por el ascenso el elenco azul naranja debió medirse con El Talar, que llegó al cruce definitorio prácticamente con sus mismas marcas (y hasta mejorándolos). Por una sanción con poco sustento del Tribunal de Disciplina de la CAB, Regatas debió jugar fuera de su cancha y a puertas cerradas el primer juego con los porteños (ya lo había hecho en el segundo con Pacífico en las mismas condiciones). En Defensores de Villa Ramallo perdió 81 a 77, con sus yerros desde la línea de libres impidiéndole ganar (terminó con 15-24 en ese rubro contra 21-21 de su rival). De esta manera, con este traspié, Regatas para alcanzar el ascenso se vía obligado a ganar los dos choques en reducto ajeno, en donde El Talar estaba imbatible en el campeonato. Hasta cincuenta de sus simpatizantes pudieron acercarse al Polideportivo “Las Malvinas” de Argentinos Juniors. Allí hizo las veces de local El Talar. Allí Regatas parecía tenerlo contra las cuerdas cuando, por supuestos incidentes, cuando ya se jugaba el último cuarto, el Comisionado Técnico tomó la decisión de hacer salir del estadio a todos los hinchas visitantes. Esto provocó que el juego estuviera interrumpido por más de media hora. En su reanudación, Regatas se mantuvo en la lucha. Y estuvo a una conversión de llevar las cosas a suplementario. El tiro del final no le salió. Y el que ascendió por la región Sur fue El Talar.
Entre 108 participantes, Regatas logró situarse entre los cuatro que arribaron hasta las instancias decisivas, lo que posicionó al básquet de San Nicolás en un lugar de privilegio que hacía tiempo no ocupaba en la escena nacional (desde que Belgrano perdió la chance de ascender con Sportivo Las Parejas en cancha de Ferrocarril Oeste en la misma división allá por 2017), la que tantas noches gloriosas tenía guardadas en su registro. Corre con fuerza un rumor por estos días de que la Asociación de Clubes (AdC) ante la posibilidad de que se produzcan varias deserciones en la Liga Argentina tiene anotado arriba en su lista el nombre de Regatas entre los probables invitados, con la intención de recuperar una plaza fuerte que la disciplina históricamente tuvo como lo es nuestra ciudad. Sería un merecido premio para los regatenses, quienes hicieron todo lo que estuvo a su alcance como para lograr ese cupo por la vía deportiva. Pero, caprichosa, la anaranjada coqueteó con el aro y salió.
