En el lago Barreales, en Neuquén, fueron hallados los restos de un dinosaurio que vivió hace alrededor de 90 millones de años: un Futalognkosaurus. Se estima que medía unos 30 metros de largo.
Los restos aparecieron muy cerca de donde en el año 2000 se habían descubierto fósiles de otro ejemplar de la misma especie.
Una de las hipótesis que se manejan es que el dinosaurio hallado esta semana sea la pareja de aquel que se descubrió hace 21 años a pocos metros de este. Pero el paleontólogo Jorge Calvo aclaró que los dinosaurios “no tienen sexo, al menos que haya una evidencia que lo confirme” y no se sabe a ciencia cierta si se trata de un macho o una hembra.
Otra hipótesis es que los restos pertenezcan incluso a un “hijo” del primer Futalognko hallado, aunque, claro está, todavía faltan una serie de investigaciones y estudios para confirmar tales presunciones.