La Legislatura bonaerense se reactivó ayer con la entrega de diplomas a las y los legisladores electos, donde el aroma a interbloque comenzó a sentirse con mucha fuerza en los pasillos.
Es que en Juntos por el Cambio -o lo que queda de ese espacio- todavía define qué hacer frente al nuevo escenario político tanto nacional como provincial. Cabe recordar que en el parlamento de la provincia de Buenos Aires no existe esa figura, aunque muchas veces funciona de hecho.
“A esta hora de la tarde no sabemos qué va a pasar con nosotros. La idea es plantear la figura de interbloque, pensábamos presentar el proyecto en estos días, pero lo cierto es que ni siquiera sabemos quién va a presidir la Cámara”, señaló una de las voces fuertes del radicalismo en la Cámara de Diputados.
Lo que sí coinciden varios, tanto del PRO, de la CC y de la UCR, es que si bien se tratará de conservar lo máximo posible la entidad Juntos por el Cambio, será difícil que pueda prosperar como hasta el momento. Vale recordar que el proyecto de ley de Axel Kicillof para tomar deuda dejó expuestas las fracturas internas.
En tanto, los libertarios tampoco saben bien cómo será su organización. “Estamos hablando, no hay nada definido, el objetivo es poder llegar a un buen acuerdo”, marcó el diputado electo por LLA, Martín Rozas.
“Así como pedimos a los partidos a nivel nacional que apoyen a Milei, nosotros tenemos la obligación de hacer lo propio con el Gobierno provincial. Como bloque independiente, iremos acompañando todas las propuestas que garanticen la gobernabilidad y que estén de acuerdo con nuestro pensamiento”, postuló a este medio el senador electo Carlos Kikuchi.
Entre las perlitas de la tarde se destacaron las presencias del intendente saliente de La Plata, Julio Garro, quien saludó afectuosamente a todos los legisladores que pasaron a retirar sus diplomas, pero hubo un especial énfasis en el abrazo al diputado massista Ruben Eslaiman, uno de los que suena fuerte para presidir la Cámara Baja.
También se hizo presente la diputada nacional electa por el espacio de Milei, la polémica Lilia Lemoine, quien estuvo en el palco mientras su par de bancada, Carolina Píparo, se quedó en el recinto. Ambas fueron a apoyar a los nuevos legisladores libertarios, aunque, según pudo conocer este medio, el diputado electo por la Séptima, Agustín Romo, no ocuparía su banca, ya que pasaría a trabajar en Nación.
