En el Concejo Deliberante, la presidenta del bloque del Frente de Todos cuestionó la intimación del municipio al hospital San Felipe por una deuda en las tasas de servicios de agua. Cecilia Comerio recordó que la institución está exenta del pago de ese tributo. Y vinculó la medida con la intención de “ejercer cierto tipo de autoridad”.
Es un tema que desde hace ya varios días llevó al Frente de Todos a pararse otra vez en una vereda opuesta a la de la conducción del municipio. La intimación al hospital San Felipe, dependiente del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, por la falta de pagos en concepto de tasa retributiva de la prestación de los servicios de agua, motivó incluso una manifestación pública este martes, convocada por trabajadoras y trabajadores de la comunidad hospitalaria. Y añadió un nuevo capítulo público este jueves en el Concejo Deliberante.
Agotado el orden del día de la última sesión ordinaria del año, Cecilia Comerio, presidenta del bloque de concejales del Frente de Todos solicitó la palabra para referirse al asunto. “Entendemos que en el ámbito de este Concejo Deliberante es importante que empecemos a dejar sentadas nuestras posturas en torno a temas tan sensibles como éste y sobre todo para generar los espacios donde podamos analizar y debatir estas cuestiones tan sensibles, como es en este caso la salud pública”, indicó la referente seccional de La Cámpora, quien advirtió a sus pares que “todos somos conscientes del rol social y sanitario de nuestro hospital, no sólo para nuestra ciudad sino para todo el norte de la provincia de Buenos Aires”.
“Lo que sucedió el martes en las puertas de nuestro hospital tiene que ver con una intimación que se hizo al San Felipe, en reclamo de una deuda por tasas que esta institución no venía abonando al municipio. Llama la atención que se haya iniciado ese expediente, habida cuenta de lo que establece la Ley Orgánica de las Municipalidades a través de su Artículo 226. El inciso primero de ese artículo de la normativa provincial establece quiénes deben ser contribuyentes de tasas y deja en claro que quienes están exceptuados son aquellas instituciones que brindan servicios educativos, de salud o de seguridad”, agregó Comerio, quien descartó motivaciones de orden “económico” o “burocrático” por parte del municipio y aseveró que la intimación al San Felipe obedeció a “un criterio político” y a la intención de “ejercer cierto tipo de autoridad”.