El atleta nicoleño, medallista en los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018, retomó los entrenamientos tras cuatro años de parate absoluto por una seria lesión en su espalda. Los nuevos estudios médicos le dieron muy bien, dejó de sentir dolores y se decidió a volver a la actividad. La semana que viene competirá en el Nacional en Mendoza.
Martín Espíndola fue uno de los jóvenes que escribieron su nombre en lo más alto del deporte nacional en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018. En un deporte tan exigente como la gimnasia artística, fue el mejor argentino durante el proceso de selección y representó al país en la máxima cita. Allí, consiguió una medalla en la competencia por equipos “internacionales”, y arribó a la final de Salto, en la cual no pudo competir por una grave lesión. Su espalda ya no resistía más.
“La gente por televisión nos ve ahí parados, haciendo la rutina, y dice ‘éste la tiene clara’. Lo he escuchado en mucha gente. No es así. Yo en la esquina de Suelo rezaba para que no me colapse la cabeza. Son muchos nervios. Por eso trabajé mucho tiempo con psicólogos deportivos para poder tratar todo eso, porque es algo duro, más cuando no estás preparado mentalmente. La gente dice que ‘el deporte es bueno’, y es cierto, pero la verdad es que el deporte de alto rendimiento no es salud. La carga horaria, la carga mental, lo hacen muy diferente”, remarcó con crudeza un tiempo atrás Martín, ya retirado de la actividad deportiva debido a sus dolores.
El tiempo cura
“Después de cuatro años que dejé el deporte, cuando me fui a hacer los nuevos estudios había cosas que habían desaparecido, como si fuera magia”, contó Martín, reconociendo que “obviamente no es así, sino que se le dio mucho tiempo de descanso al cuerpo”.
“Este año había empezado el gimnasio de pesas, y hasta hace unos meses me llamó Eugenio (Coffey, su entrenador en la Academia Conesa) que necesitaba que lo ayude con el grupo. Y fue ahí que después de una de las clases que fui a dar como profesor, le pregunté a Eugenio si podía subir a las paralelas a hacer un ejercicio: hice un ejercicio bastante complicado y Eugenio me dice ‘vos tenés que volver’. Y acá estoy”.
“Después de un tiempo entrenando me decidí a volver, hacer las cosas bien, así que por ahora no tengo algo previsto ni nada. Pude recuperar rápido el nivel”, contó el nicoleño de 22 años, que la semana que viene competirá en el Nacional de Mendoza. “La idea del Nacional es ir a competir después de tantos años y ver cómo me siento. Si sale un lindo torneo, me deja las puertas abiertas para muchas cosas el año que viene. Vamos a esperar y a ver qué sale”, dijo.
“El medico le había dicho que tenía que parar al menos dos años”, recordó el entrenador Eugenio Coffey. “Se hizo todos los estudios y su espalda está excelente, sin problemas. Se selló la fisura, está acomodada. Aparecimos un poco en el Cenard a algunos entrenamientos, y después le hicieron el alta médica de la Confederación y de la Secretaría de Deportes. Vieron todos los estudios y le dieron el alta para volver a la competencia”, contó.
Con el objetivo de volver al radar de la Selección, Martín dirá presente en el próximo Nacional. Dejará de lado algún aparato que pueda resentir su espalda (especialmente Suelo), y se focalizará en Anillas, Salto, Barra y Paralela.