Ya sea en la modalidad cuento del tío, hackeos de cuentas de WhatsApp o mediante páginas pornográficas, hubo en los últimos tiempos un crecimiento de las estafas telefónicas en San Nicolás resultando victimas en su mayoría personas mayores de edad. Desde la oficina de cibercrimen que opera en la fiscalía advierten sobre este tipo de ilícitos.
De la redacción de El Norte
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Dos vecinos de la región, uno de San Nicolás y el restante de Ramallo denunciaron mediante un llamado al 911 que fueron víctimas de amenazas. Según sus relatos, fue en circunstancias en que estos navegaban por paginas porno que desde las mismas, para continuar viendo más contenido, les solicitaron sus datos personales, y al ingresarlos enseguida fueron contactados con personas de acento colombiano, que mediante intimidación por mensajes de audio, les exigían la entrega de dinero o sino enviarían sicarios que asesinarían a sus familias. El nicoleño realizó efectivamente una transferencia cercana a los 50.000 pesos mientras que el vecino de Ramallo no transfirió ningún dinero pero hizo la denuncia. La unidad de cibercrimen se encuentra tratando de ubicar a los estafadores que como explicamos anteriormente lograron recabar la información mediante ardides.
Estafas
Desde la oficina de cibercriminen advierten sobre una nueva modalidad delictiva que consiste en hackear el WhatsApp. Los delincuentes envían un mensaje falso haciéndose pasar por operadores de WhatsApp y requieren un código de 8 dígitos que le será remitido al celular de la víctima. Luego de conseguirlo se adueñan de la lista de contactos del usuario damnificado y solicitan dinero a los familiares y amigos simulando una emergencia u ofertan dólares a bajo precio. Los delincuentes se contactan telefónicamente con personas de avanzada edad, les hacen creer que son sus familiares y que enviaran a su domicilio a una persona de confianza para retirar sus ahorros, peso dólares joyas ya que iba a ocurrir una corrida bancaria.
Cualquier denuncia o asesoramiento se recomienda dirigirse a la dirección especializada en cibercrimen que opera dentro de la fiscalía general ubicada en Alem 114
La semana pasada precisamente una señora mayor de edad, de unos 80 años, fue víctima de una estafa de estas características cuando recibió un llamado de un joven que simulaba ser su sobrino, que le advertía que iban a cerrar las cajas de seguridad del banco donde operaba quedándose con todos sus ahorros. La mujer engañada retiró todo el dinero en dólares que colocó en una bolsa para luego entregársela a un hombre que pasó por su domicilio y que lo “depositaria” en otra entidad más segura concretando así la estafa.